Claro















Tu figura es arcilla
que se sentó a mi lado,
te introduzco mi esencia,
sin concebir que eres barro.
¿Por qué amo? Mi visceral
figura del vano intentado.
¡Qué estática señora!
de esta carcel de asfalto
¿Por qué cambiaste las luces
por verdes gigantes prados?
¿Por qué talaste los árboles
que en mi bosque amargo
marchitaban cada flor
y espantaban los pájaros?
Porque tú estás segura
dentro de mi oscuro claro,
centro de mi angosto bosque,
convergencia de mis llantos.

1 comentario:

blo dijo...

me complace darle una calurosa bienvenida a este maravilloso mundo de la escritura propiamente dicha.

Cuán evocadora es esta porcion de ti, me recuerda al norte español.

P.D. cambia el perfil so soso :)